En plena Sierras de Famatina este sitio es uno de los más destacados por su singular belleza. Rodeado de pastizales amarillos que se entremezclan con tonos verdes, ovejas y cabras que pastan, el rojo de sus rocas, arroyos de los deshielos que corren entre quebradas, y el imponente nevado de Famatina, le dan un toque mágico de tranquilidad y monumentalidad. Visitarlo significa también volver en el tiempo por donde transitaron las culturas originarias, los Incas con el Qhapaq Ñan (Patrimonio de la Humanidad). Actualmente puesteros que tienen sus animales en este increíble lugar y se puede disfrutar en distintas modalidades de turismo aventura, naturaleza y ruralidad, como así también experiencias gastronómicas de altura. Se accede solo en vehículos 4x4. Visitar con guía o agencia de viajes habilitada